En una extensa charla con NecRadio 98.3, la jueza de Garantías N°2 de Necochea, Aida Lhez, abordó cuestiones que atraviesan la sociedad moderna, desde el impacto de la tecnología hasta los desafíos del sistema penitenciario y la educación como herramienta de transformación personal.
Tecnología y soberanía mental
Aida comenzó analizando la influencia de las redes sociales y el uso de la tecnología: “Lo más importante no es solo la soberanía del país, sino la soberanía de nuestra mente”, sostuvo. La jueza explicó que los algoritmos no son casuales y que las plataformas digitales condicionan la forma de pensar y actuar de los individuos, muchas veces con fines económicos.
En este sentido, propuso un uso consciente de la tecnología, comparándolo con el consumo de cualquier recurso: “Está bien usarla, pero en exceso nos puede conducir a la adicción y a la pérdida de libertad. Un día sin celular puede ser un ejercicio de desintoxicación mental”.
Justicia y respeto a la Constitución
Sobre el sistema judicial, Lhez destacó la importancia de respetar el principio de presunción de inocencia: “Hasta que un juez declare culpable a alguien, esa persona debe ser considerada inocente. La difusión prematura de información puede afectar gravemente la vida de alguien que no cometió el delito”.
La jueza también advirtió sobre la complejidad de aplicar la ley: “Nuestra constitución es hermosa, y los argentinos primero tenemos que aplicarla. Cambiarla sin aplicar sus fundamentos no resuelve los problemas”.

Cárceles y programas de resocialización
Uno de los temas centrales fue la situación de los pabellones penitenciarios: Lhez describió condiciones de hacinamiento, jóvenes privados de libertad con problemas de adicción y la dificultad de implementar programas de resocialización.
Explicó que el programa Cambia, que ella supervisa, busca brindar herramientas prácticas para que las personas puedan analizar sus conductas, reflexionar sobre sus decisiones y trabajar en su transformación personal: “No se trata de justificar, sino de ofrecer la posibilidad de cambiar la vida de quienes lo merecen”.
La jueza enfatizó la importancia del autoanálisis y la educación como claves para generar nuevas oportunidades, incluso dentro de contextos adversos.
Reflexión sobre la sociedad
Lhez hizo hincapié en la responsabilidad social y en la importancia de ver al otro como ser humano: “Si no nos conectamos desde la humanidad, nada tiene sentido. La dignidad y la libertad son herramientas esenciales para transformar vidas”.
También cuestionó la dependencia de planes sociales sin oportunidades de empleo real: “La asistencia permanente puede robar dignidad y libertad. La verdadera transformación requiere herramientas, educación y posibilidades para elegir quién queremos ser”.
Para Aida Lhez, la clave está en la conciencia, la reflexión y la educación, tanto para quienes usan la tecnología como para quienes atraviesan el sistema penitenciario. Su mensaje es claro: con herramientas, conocimiento y humanidad, es posible generar cambios profundos, individuales y colectivos.