En las últimas horas, y a pedido de la Fiscalía N°30, el Juzgado de Garantías N°1 ordenó la detención de una mujer acusada de participar en el violento robo ocurrido en marzo en una vivienda de avenida 91 entre 26 y 28, en Necochea. Con esta nueva detención, ya son tres los imputados por el caso que conmocionó a la comunidad.
La mujer ahora detenida es la hija de la empleada doméstica que trabajaba en la casa de la familia Salas. Según la investigación, habría sido quien aportó información clave para que los dos delincuentes armados pudieran ingresar a la vivienda, por lo que fue imputada como partícipe necesaria del hecho.
Durante el análisis de los teléfonos secuestrados a los autores materiales —detenidos hace meses atrás en Quequén y Escobar— se hallaron audios comprometedores que vinculan a la joven con la planificación del asalto. El fiscal Carlos Larrarte solicitó su detención luego de reunir pruebas que indican su rol en la organización del robo.

El caso
El hecho se produjo en marzo, cuando dos mujeres fueron sorprendidas en su casa de la avenida 91, reducidas a punta de pistola y encerradas en el baño, mientras los asaltantes sustraían diversos objetos de valor. Tras el hecho, la investigación avanzó rápidamente con el análisis de cámaras de seguridad y testimonios.
Los dos autores materiales del robo —identificados como Romero y González— ya estaban detenidos. Uno fue aprehendido en el barrio 120 Viviendas de Quequén y el otro, tras una persecución en moto, en la localidad de Escobar. Este último intentó huir, cayó en una zona de barro y fue reducido por la policía luego de sacar un cuchillo.
Ambos están imputados por robo agravado con uso de arma de fuego, privación ilegítima de la libertad y hurto, entre otros cargos.
Investigación en marcha
Con tres personas detenidas, la causa avanza firme. El fiscal Larrarte busca determinar el destino de los objetos robados y si los imputados participaron en otros hechos de similares características. La información obtenida de los celulares, las pruebas testimoniales y el material secuestrado resultan claves para el cierre del caso.