En Necochea, la realidad de los jubilados y pensionados enfrenta nuevos desafíos en un contexto sanitario y social complejo. Gerardo Durán, ex titular del PAMI local, dialogó extensamente con Miguel Abálsamo, desde los estudios de NEC Radio, 98.3 del multimedios NQ, durante el programa “Cerrando la Mañana”, sobre la actualidad de la obra social, las controversias generadas por el cambio de prestadores y la necesidad de políticas claras y comprometidas.
Durán, quien mantiene un trabajo constante en contacto con los adultos mayores, señala con preocupación que “hoy la situación está tremendamente compleja. PAMI limitó las prestaciones, cambió algunas prestaciones que a mi entender las niveló para abajo, lamentablemente, caso la entrega de pañales que todo el mundo se está quejando, que no les llegan en tiempo y forma.” Además, destaca que esta situación añade una carga económica extra para quienes perciben ingresos muy bajos, enfatizando “es tristísimo ver a diario gente que no puede comprar medicación ni un bolsón de pañales.”
En relación con el reciente traslado de afiliados desde el Hospital Ferreyra a la Clínica Cruz Azul, Durán explicita que “los afiliados tienen el derecho y pueden hacerlo, aquellos que fueron cambiados compulsivamente pueden regresar mediante un trámite muy simple en la agencia de PAMI, tanto de Necochea como de Quequén.” Esta libertad, sin embargo, no exime a los usuarios de enfrentar procesos engorrosos y que generan incertidumbre. Sobre esto, reflexiona que “la angustia y la preocupación que sometés a los afiliados es un trastorno innecesario que perturba la calidad de vida de los jubilados”.
Sobre la oferta médica disponible, el ex titular explica que “médicos de cabecera hay unos 20, que son quienes dirigen el tránsito del afiliado; pero para especialidades, el universo se amplía, con atención en hospitales y consultorios privados, o en otras ciudades como Mar del Plata.” A pesar de las dificultades, reconoce que “PAMI nunca te deja de pie, aunque tenga vaivenes, la cobertura sigue siendo buena en otros lugares como Mar del Plata o Buenos Aires.”
Un aspecto menos difundido y valioso, según Durán, es la oportunidad que ofrece la obra social para mejorar la salud mental y calidad de vida a través de actividades recreativas y viajes. Sin embargo, lamenta que “en este momento no está abierto ni el programa de viajes ni otras actividades que fueron muy bien recibidas anteriormente, como clases de natación, yoga o danza.” Y remarca enfático: “Siempre pensé en darle un viaje al adulto mayor y no tantos medicamentos.”