El titular de la CGT local sostuvo que “A mediano o corto plazo vamos a tener un empobrecimiento de las condiciones de vida, un empeoramiento de la calidad de vida de todos ante, también, la dificultad de articular una oposición política que sea contundente”
Haciendo un repaso por la actualidad, en el nuevo programa “Lo que pasa”, en la primera mañana de NecRadio 98.3, con la conducción del periodista Rubén Curriés, dialogamos con el titular de la CGT delegación Necochea, Demian Ledesma.
Con referencia a la situación por la que atraviesa el país, a los reclamos que se realizan desde distintos sectores, al, paro general del último jueves, el titular de la CGT local, Demian Ledesma sostuvo que “seguimos en la misma situación y con algunas cuestiones colindantes que también nos afectan. Por ejemplo, de servicios públicos, ya sea el fluido eléctrico o el transporte, es algo que hoy tenemos en la primera plana de los diarios, con el accidente de los trenes del otro día”.
Amplió diciendo que “tenemos una situación de vaciamiento del aparato de contención, ya sea salud, educación, servicios públicos, energía, obra pública. La situación sigue igual y eso afecta también al mundo del trabajo”.
Con referencia al análisis del paro del último jueves, sobre si dista mucho de lo sucedido en Capital Federal y en Necochea, Ledesma aseveró que “siempre tiene un condimento local. Cualquier medida que tiene su punto de inflexión en el ámbito capitalino, después en los territorios, tiene otras características. Y está bien que sea así porque todos tenemos nuestras propias idiosincrasias”.
Altísimo acatamiento del paro
Hizo mención a que “acá en lo local, claro, tuvo un altísimo acatamiento en las primeras horas hasta que se convocó a la concentración. Después por la tarde fue decayendo en el área comercial, lo que también es entendible porque es un sector muy golpeado por la recesión, por la caída del consumo y es entendible que aún adhiriendo a la protesta, abran las puertas tratando de recuperar un poco de la actividad, porque perder un día los afecta mucho”.
El gremialista continuó explicando que “nosotros teníamos el mandato de no llamar a movilización porque la idea de la conducción nacional era que se notara la paralización de la actividad. Esa era la consigna, pero tuvimos el 24 de enero una manifestación muy importante en Necochea cuando fue el primer paro de CGT y creíamos que teníamos la obligación de honrar ese acompañamiento que recibimos ese día y fijamos un punto de encuentro frente a la Municipalidad”.
Una marcha espontánea
En tal sentido dijo que “la verdad que vino bastante gente y bueno, en respeto a esa participación que nosotros promovemos hicimos una marcha, pero no estaba previsto, así que surgió de manera espontánea. Eso habla también de una necesidad”.
El referente en nuestra ciudad del movimiento obrero se refirió a que “esto también creo que lo que hace es corroborar que nosotros no tenemos la pretendida manipulación de la participación popular. La acusación más recurrente hacia el movimiento obrero es que aparatean las movilizaciones, que la gente va obligada o por una retribución, el famoso pancho y la coca, y acá quedó claro que nosotros no llamamos una movilización, fijamos un punto de encuentro como para quien quisiera venir, teníamos una expectativa mucho menor y terminamos teniendo más de dos cuadras de marcha”.
Explicó Ledesma que “uno atiende la demanda de la gente, uno está recibiéndolo, tratando de darle contención, de llevar a la gente que venga alguna palabra, algún diálogo y termina siendo desbordado por la cantidad de gente que necesita la marcha, porque hay que respetar también esa voluntad”.
Análisis de la situación económica
Se refirió el dirigente sindical a que “nosotros lo que hacemos es un análisis del impacto de la situación económica y la decisión del gobierno en la vida cotidiana de la mayoría, digamos, de todos. Hay quienes, pese a compartir el análisis, entienden que hay que tener un proceso de acompañamiento, de paciencia y confían, y está bien que así sea, porque por algo se lo votó a Milei, confían en que esto es un tránsito y que más adelante todo mejorará”.
Continuó diciendo Ledesma que “respeto esa opinión, porque a mí me parece que confrontar con una gran parte de la ciudadanía que depositó su esperanza ante frustraciones pasadas en una opción política es absurdo y aparte es lesivo con el respeto de la opinión de los demás. Así que nosotros no tenemos una discusión con quienes no comparten el criterio que nosotros tenemos. Lo que buscamos es ampliar los consensos y tener la posibilidad de que, si más adelante esta situación se agrava y lo que nosotros vemos y proyectamos se cumple, esa gente no tenga ningún impedimento para sumarse a las protestas o acciones gremiales que nosotros propongamos en el futuro”.
“Empobrecimiento de las condiciones de vida”
El titular de la CGT manifestó que “me parece que en los términos estrictamente económicos, que es en los que se mueve Milei, con la planilla de cálculo frente a los ojos y con un gobierno que ha mostrado niveles altísimos de deshumanización, a mediano o corto plazo vamos a tener un empobrecimiento de las condiciones de vida, un empeoramiento de la calidad de vida de todos y ante también la dificultad de articular una oposición política que sea contundente en sus liderazgos y en su coherencia. Yo veo una crisis de representatividad muy grande en todos los espacios políticos, incluso en el de la Libertad Avanza, que también tiene infinidad de fracturas y discusiones internas”.
Agregó Ledesma que “considero que el rol del movimiento obrero, aún con todas las críticas que se le puedan hacer, algunas las compartiré y otras las debatiré, es fundamental porque es el que articula la protesta social, el descontento, la situación desesperante de muchos sectores. Tenemos que movernos prudentemente pero con contundencia y con firmeza”.
Refiriéndose a las distintas ideas, Demian Ledesma sostuvo que “me parece que hay que dejar fluir y que corran las ideas y que los debates se produzcan con el mayor respeto y la mayor honestidad, porque también ahí hay una discusión, me parece que hay una discusión que nos tenemos que dar como sociedad, porque a veces nos toca hablar siempre de roles de responsabilidad dirigencial, menores o mayores, pero como sociedad también tenemos unas enormes dificultades para poder empatizar con el prójimo, para poder construir cooperativamente consensos”.
Hizo mención el dirigente a que “la sociedad que ha crecido en las redes sociales, sobre todo en Twitter, no la quiero yo en la vida real, la verdad que prefiero una sociedad que pueda entender el sufrimiento del otro, compartirlo y socializarse para remediarlo. Eso no es responsabilidad exclusiva de una dirigencia mala o buena, es un comportamiento cotidiano que vemos en la gente día a día en cualquier ámbito. Aunque caiga mal a quien lo escuche, hay que decirlo, si no lo remediamos desde ahí, la solución mágica desde arriba no va a venir”.
Resaltó que “me parece que en esta discusión se plantea revisionistas sobre la historia de la Argentina, algunos van 70 años atrás, otros se proyectan a 100 años y hablan de una grandeza pasada que hoy no tenemos. Bueno, esa grandeza pasada se construyó con ese sistema. Nos fuimos tocados por la verita mágica. Hubo mucha curiosidad de los colectivos para construir este país y tener las posibilidades que tenemos. Si no recuperamos ese espíritu, vamos a seguir confiando en soluciones mesiánicas y vamos a seguir votando a quienes nos prometan puentes, edificios, túneles, subfluviales, lluvia de inversiones o revoluciones productivas”.
“Deterioro de larga data”
Puntualizó Ledesma que “creo que tenemos que entender como sociedad que el deterioro viene de larga data y que la solución para ese deterioro también va a llevar tiempo. Vamos a tener que aceptar propuestas largoplacistas”.
Al referirse a cómo continuará, o los pasos a seguir tras el paro y las medidas, explicó Demian Ledesma que “el plan de acción por ahora está basado en evaluar cuál es el impacto real de la ley bases, que es la que está en debate en el Senado de la Nación, donde hay algunos artículos que parecen no pasar y que van a tener que llevarse a revisión nuevamente en la Cámara de Diputados, llamesé el impuesto a las ganancias y sobre todo el régimen de incentivos a las grandes inversiones. Me parece que con esa posibilidad podemos rediscutir o enmendar algunas de las cosas que consideramos muy malas de la ley bases. También, por ejemplo, el tema de las jubilaciones y sectores que sufren el arbitrio de un gobierno que ha mostrado mucha crueldad para los sectores más vulnerados”.