Refiriéndose a los 48 años que se cumplieron de la última dictadura militar, el licenciado y doctor en ciencias políticas repasó la historia en la previa y cómo derivó el golpe del 76
El domingo último se cumplieron 48 años del inicio del período más oscuro y fatídico de nuestro país, como fue el nunca bien ponderado “Proceso de reorganización nacional”, como denominaron los propios brazos ejecutores de aquel nefasto y triste período en Argentina.
Para hablar de parte de la historia de lo previo y de los sucesos que fueron derivando en el proceso de la dictadura militar, visitó los estudios de NecRadio 98.3 para dialogar con el periodista Miguel Abálsamo en el programa “Cerrando la mañana”, el licenciado en ciencias políticas, asesor y quien vivió de muy cerca todos aquellos sucesos, Ramiro Caro Figueroa, quien señaló que “habiá un grupo que se denominaba antiverticalista dentro del Justicialismo, que estaba en contra de Isabel (ex esposa de Perón, por ese entonces ocupando la presidencia de la Nación), entre los que estaban, Luis Sobrino Aranda, por Santa Fe, Julio Mera Figueroa, diputado por Salta, Julio Bárbaro y Nilda Garré, ellos estaban en el grupo de trabajo pidiendo la renuncia de Isabel Martínez de Perón”, y resaltó además que “hubo lesgisladores justicialistas que trabajaron abiertamente para el golpe”.

El gran respaldo al golpe
El salteño continuó diciendo y refiriéndose a cuántos apoyaron y respaldadon el golpe, que “el martes 23 de marzo de 1976, en la esquina de la Confitería El Molino, había una manifesción de la FUBA (Federación Universitara de Buenos Aires), en la que los jóvenes estudiantes estaban pidiendo que la echaran a la presidente. Entonces, hoy todo el mundo se olvida cómo se gestó el golpe, y desde los grupos terroristas, con Firmenich a la cabeza, decían la frase ‘cuando peor, mejor'”.
Hizo mención el doctor en ciencias políticas que “la idea que tenían los grupos que pedían la renuncia de la presidente y apoyaban el golpe de Estado, pensaban que era mejor que asumieran los militares, porque enseguida la gente se iba a dar cuenta de que no servían para gobernar, e iban a pedir que los sacaran y nosotros (la oposición) nos hiciéramos cargo del gobierno. Una tesis alocada, muy alejada de la realidad, y los que ya teníamos experiencia, porque ya habíanos sufrido las consecuencias del golpe de Onganía en 1966, sabíamos que lo que viniera iba a ser mucho peor desde todo punto de vista”.
Comunistas apoyando el “golpe piola”
Haciendo gala de una gran memoria y refrescando aquellos momentos, Caro Figuera manifestó que “el Partido Comunista, luego del golpe del 76, largó la consigna ‘Videla-Viola, un golpe piola’, y en las reuniones que se hacían en los organismos de Derechos Humanos en el exterior, cuando iba la delegación argentina para denunciar la violación a los derechos Humanos, el lobby que hacía el Partido Comunista de Argentina, hacía que los paises de la órbita socialista, se abstuvieran o votaran en contra de la posición argentina; por ejemplo Fidel Castro nunca hizo ningún tipo de declaración sobre la dictadura argentina”.
Y agregó que “otra locura, cuando Estados Unidos decidió un embargo cerealero a Rusia, el país que le proveía los granos a Rusia era Argentina, en plena dictadura, en el gobierno de Videla, esas fueron algunas de las incoherencias que padecimos”.
Quisieron matar a Perón
Caro Figueroa no titubeó en señalar que “en aquellos días me imaginaba lo que se venía. Cuando Perón regresó a la Argentina, el 20 de junio de 1973, él mismo dijo ese día lo quisieron matar en el puente 12, cuando se armó el tiroteo. Esa es una historia nunca aclarada, sobre qué pasó, quién inició el tiroteo, porque obviamente los dos bandos que lo protagonizaron estaban armados, no eran simples expectadores que estaban ahí. La cuestión es que Perón, a la noche siguiente, en un discurso que dio por cadena de radio y televisión, dijo nosotros somos justicialistas, somos los que las veinte verdades dicen, no hay aditamentos a nuestra doctrina, y esto era un mensaje claro a la Izquierda, que quiso dar ese golpe de efecto apoderándose del palco, pero Perón fue contundente”.
El enojo de Perón con Cámpora
Continuó relatando que Juan Domingo Perón, antes de regresar de Madrid definitivamente a la Argentina, “lo fue a visitar al doctor Puigvert, que era un urólogo muy prestigioso, que tenía su clínica en Barcelona, fue a despedirse y le dijo, doctor me tengo que volver a la Argentina, porque Cámpora me llenó el gobierno de maricones y comunistas, tengo que volver para tomar el gobierno, es decir, Perón, cuando hablaba con alguien que no estaba en la política, tenía otro trato, se abría y le contaba este tipo de cosas que no le contaba a políticos”.
Rememorando toda la historia de los tiempos previos a la dictadura, Ramiro Caro Figueroa continuó relatando que “luego de la llegada de Perón, quien vino muy enojado con Cámpora y con todo lo que había estado haciendo, a partir de ahí las relaciones fueron tensas, en especial con los Montoneros, y en marzo del 74, en un acto que se hizo para conmemorar las elecciones del año anterior, Firmenich en su discurso dijo el poder brota de la boca del fusil, en un claro y abierto desafío a Perón, entones las relaciones nunca fueron buenas. Perón ganó las elecciones del 23 de septiembre, con el 63% de los votos, y a los dos días asesinaron a Rucci, lo que fue un golpe tremento para Perón”.
Continuó Caro Figueroa indicando que “asumió en octubre, y en el medio hubo unas inundaciones de los campos de Azul y la JP Montoneros, organizó lo que se llamó Operativo Dorrego, con el Ejército, y Perón estaba molesto, y ahí dijo ahora éstos le limpian los campos a la oligarquía, estaba muy molesto porque desde adentro le estaban haciendo todo eso”.
Tras el fallecimiento de Perón
Otro de los puntos que recuerda Caro Figueroa, como una especie de quiebre en la historia, es cuando “Perón falleció el 1° de julio de 1974 y el 6 de septiembre Montoneros pasó a la clandestinidad y le declaró la guerra al gobierno constitucional, y continuaron los atentados con bombas, secuestros y todo lo que ya conocemos, y la gota que colmó el vaso, fue el copamiento del Regimiento de Formosa, cuando ingresaron a sangre y fuego, y los colimbas que estaban en el cuartel, lograron resistir ese ataque”.
El reposicionamiento de Videla
Otra de las “anécdotas” que recordó Caro Figueroa, es que a medidados del año 1975 Jorge Rafael Videla no tenía destino, y un militar que está sin destino, llega a fin de año y pasa a retiro. Pero en ese momento se había llamado a elecciones en Misiones, por el fallecimiento en un accidente aéreo del gobernador y vice, y hasta allí viajaron varios integrantes del gobierno y el sindicalismo nacional, como parte de la campaña proselitista, entre ellos Lastiri, que era presidente de la Cámara de Diputados, y Lorenzo Miguel. Cuando éstos volvieron a la base militar en el avión que los había trasladado, los estaba esperando, con su uniforme militar, el general Videla, quien les pidió a ambos, que por favor le consiguieran un destino”
Continuó haciendo memoria Ramiro Caro Figueroa, al decir que “se movieron, con la influencia de Lastiri, y lo nombraron a Videra jefe del Estado Mayor Conjunto, un organismo burocrático, que en ese momento no tenía la relevancia que tiene hoy. A partir de ahí Videla pudo continuar en actividad, sino hubiese pasado a retiro a fin de año. Luego llegó la crisis profunda en el gobierno, se armó lío adentro del Ejército, por algunos nombramientos que hizo Isabel Perón y después de muchas idas y vueltas, discusiones y fuerte crisis también en el Ejército, terminaron nombrando a Videla comandante general del Ejército”.
Reflejó Caro Figueroa que “luego, tras muchos acuerdos y desencuentros, se decidió que a finales de marzo de 1976, más precisamente el 24, se haría el golpe y los militares tomarían el mando del país, y de ahí en más, llegó todo lo que ya sabemos”.