El necochense Tomás Fuentes Benítez, recibió un premio en Shangai, luego de haber estado varios dias de vacaciones en la Argentina.
“Fue una agradable bienvenida a Shanghai y encontré esto en mi escritorio: mi startup Perfect Bowl recibió el premio Rise 100 E-Commerce Award, otorgado por 小红书 (Instagram de China) a las nuevas marcas de más rápido crecimiento en su plataforma”, destacó, en redes sociales.
Tomas, estuvo en Necochea, pasando las tradicionales fiestas de fin de año y en su retorno a China, viajó en el mismo avión comercial que utilizó el Presidente de los argentinos, Javier Milei.
Tomás Fuentes Benítez, que se halla radicado en China desde hace seis años y medio, relató su experiencia en ese país asiático, donde vivió primero en Beijing y más recientemente en Shangai, llevando adelante en la actualidad un emprendimiento vinculado con comidas saludables.
Así narraba su vida en China
Lo hizo en el transcurso de una entrevista que se le hizo en el estudio de “Voces de la Ciudad”, donde el abogado de 33 años señaló que la mayor dificultad que debió superar ha sido la del idioma.
Hace un mes y medio que está en Necochea, después de tres años, reencontrándose con su familia, que reside en Quequén.
El necochense contó que lo complicó el Covid: “Se largó la pandemia y yo estaba en Londres, así que volví rápido a China donde hice una cuarentena de tres semanas, lo que me llevó a no venir a Argentina para no descuidar la empresa”. Se trata de “una empresa de alimentos, snacks saludables y comida congelada que distribuyo”.
LA BARRERA DEL IDIOMA
¿Y cómo te arreglaste con el idioma?, fue una pregunta lógica, cuestión que explicó con detalles: “Es muy difícil el idioma, cuando llegué a China me di cuenta que sabía menos de lo que pensaba, por la complejidad, pero yo quería ser especialista con el negocio en China y no podía tocar de oído, así que me organicé una profesora que venía todos los días a las 8 de la mañana antes de empezar a trabajar y fue lo más difícil que estudié en mi vida, el chino”.
Argumentó Tomás que “es el único idioma sin alfabeto, por lo cual hay que aprenderse los caracteres chinos, mientras que nosotros tenemos el alfabeto con 27 letras y con eso se combina, así que si no conocés el carácter no podés leer. Hoy ya lo hablo fluido”.
Acerca de la vida cotidiana y costumbres en un país de 1600 millones de habitantes, describió que “es un país de una amplitud territorial tremenda, es prácticamente el 100% del territorio de Europa y tiene tres veces la población de Europa”, y agregó sobre su experiencia personal que “me atraía Asia del Este, Japón, Corea y China, me parecía muy exótico, me fui porque quería tener una aventura pero también a vivir y aprender de los chinos y convertirme en un puente serio en cuanto a negocios entre occidente y China”.
Sin embargo, reconoció que “lo que no me imaginaba era que iba a poder lanzar mi propia empresa, que tiene base en Shanghái con depósitos en distintos lugares del país. Tengo 15 personas a cargo en mi oficina y otras 25 en la línea de producción en la fábrica”.
VIDA SOCIAL DIVERTIDA
Sobre su vida social en China, aseguró que “es muy divertida, ya que mis amigos chinos han estudiado en Estados Unidos o Europa y somos muy parecidos culturalmente, de hecho tengo un equipo con el que juego al fútbol todos los fines de semana, y Shanghái tiene una variedad tremenda de bares de todo el mundo y la mayor cantidad de cafés, tiene 20 millones de habitantes”.
Finalmente, Fuentes Benítez reveló que su conexión con la actualidad argentina nunca se cortó. “Estoy informado de la política argentina, sigo mucho a la noche cuando ceno los programas de política y estoy informado, y me da mucha lástima cómo está la realidad porque la gente en Argentina es muy trabajadora y se esfuerza mucho, y después por decisiones erradas de los políticos a mi juicio hace que a la gente no le vaya lo bien que le tendría que ir, hay mucha inestabilidad económica”.