Dos amigas y sus tres nenas vieron cómo sus vacaciones se volvieron añicos luego de que les sustrajeran todas sus pertenencias mientras transitaban por Bahía Blanca la madrugada de este miércoles en su camino desde Rincón de los Sauces a Necochea.
Un hecho habitual de quienes tienen que cruzar por Bahía Blanca para ir rumbo al sur o viceversa, de sufrir los ataques de “delincuentes” que literalmente se cuelgan de las camionetas para robar todo lo que tengan a su alcance.
Se trata de un sector poco iluminado, que se debe transitar a muy baja velocidad por el tránsito masivo de camiones y ante la total ausencia de autoridades policiales. Lo que llama poderosamente la atención que son incontables los casos de robos: familias que vienen de Bariloche, pescadores, hasta pilotos de Turismo Carretera han sufrido estos ataques ante la total parsimonia de quienes tienen que bregar por la seguridad de la zona. Tampoco se aprecia que la Municipalidad tome cartas en el asunto.

“Se nos colgaron de la camioneta en marcha y nos desvalijaron”, relata entre lágrimas Glenda, una productora agropecuaria de Neuquén, que junto con su amiga tenía tres meses juntando dinero y planificando este viaje.
Además del robo pasaron por el calvario de recorrer varias comisarías y esperar horas para poner la denuncia.
La víctima hizo un esfuerzo entre lágrimas para reconstruir lo sucedido y orientándose por algunas referencias debido a que no conoce la ciudad para relatar lo sucedido a La Brújula 24.
Glenda refiere que paró en la estación de servicio Axion que está cerca de la Ruta 3 (se refiere a la que se ubica entre esa vía y avenida Sesquicentenario) poco antes de las 5 am y que tras sacar medicamentos y otras cosas, cerró bien la burbuja de su camioneta Ford Ranger en donde estaba todo su equipaje y documentos.
Tras retomar su camino buscando la Ruta 3 asegura que pasó por unas vías donde disminuyó la velocidad (la policía la ayudó a determinar que se trata de El Guanaco) y que todavía dentro de Bahía paró y fue donde se le derrumbó su viaje: le habían robado.
“Se llevaron todo. Solo tenemos lo puesto. Sacaron la conservadora con los medicamentos, las mesas, las frazadas, en fin, los sueños, las ilusiones de las nenas que tenían meses preparando sus juguetes para el viaje”, señaló ya en su lugar de destino.
Frustradas y en shock, decidieron dirigirse a una comisaría. La primera a la que fue no logró recordar cuál era, pero le dijeron que allí no le podían tomar la denuncia por un tema de jurisdicción y le indicaron que fuera a la Comisaría Tercera, donde tampoco pudieron atenderla porque el hecho sucedió en jurisdicción de Comisaría Quinta, donde finalmente la atendieron.
Fue allí donde durante tres horas y media esperó para concretar la denuncia. Glenda refirió que su mayor asombro fue que los policías le dijeron que “es normal” el robo en la zona.
“No puede ser que no cuiden a los turistas. Nos vinimos con lo puesto, no tenemos nada acá en Necochea. Ellos nos dijeron que siguiéramos viaje porque no era algo que podían solucionar hoy”, agregó la víctima y sumó: “Nos dijeron que no podían entrar a la villa, que no les corresponde, pedimos agua y nos dieron agua caliente de la canilla”.
Glenda, su amiga y sus hijas están tratando de reponerse del mal momento que vivieron: “Tenía a esas personas en la camioneta, es angustiante pensar que podían haber entrado. Nos dijeron que era normal, y me parece que eso no puede ser así. No voy a parar hasta que se haga visible y que esas cosas no vuelvan a pasar”.