Ramiro Caro Figueroa compartió un mano a mano con Miguel Abálsamo en el que analizó el panorama político de nuestro país.
“El Gobierno termina el año con un balance positivo para su gestión. Curiosamente después de muchos años diciembre fue un mes tranquilo, sin manifestaciones populares, sin cortes de calle y sin concentraciones”, expresó.
“El oficialismo debe hacer una muy buena elección este año para mejorar sus números en el Congreso. Resta determinar si La Libertad Avanza y el Pro pueden lograr una coalición”, sostuvo.
Y agregó: “El Gobierno, a diferencia de otros años, no pondrá en agenda un plan platita, sino todo lo contrario: seguirá profundizando el ajuste con el objetivo de mostrarle a la gente un lugar mejor”.
“El desdoblamiento de las elecciones huele a fraude la mayoría de las veces. La gran batalla se dará en la provincia de Buenos Aires. La oposición siempre está al acecho e intentando posicionarse de cara a las elecciones”, aseguró.
Y cerró: “Hay muchos dirigentes que deben definir su posición todavía. Queda mucha agua por correr debajo del tiempo, pero como nadie es suicida buscarán el mejor acuerdo posible. Controlar la inflación, que es el peor de los males que tuvimos y tenemos los argentinos en las últimas décadas”.